Cuando Álvaro supo que íbamos a adaptar un local en un bajo para un CAIT enseguida me llamó por teléfono y me dijo que nos ayudaría en la actividad de su empresa.

Cerydis es una empresa familiar, asentada en el sector y en estos tiempos de pandemia supongo que irán como todos. De ahí que esta ayuda tenga, si cabe, más valor para nosotros.

Nos ha equipado los baños para el CAIT y Salas Multisensorial y Psicomotricidad de Polígono Sur; revestimientos de azulejos, sanitarios, grifería y no sé qué más.

Muy sensibilizado con nuestros pequeños, padre de una preciosa niña, con 6 años y a la que aún no se ha puesto nombre a su trastorno.

El que no sea verbal y se exprese a través de un comunicador no le hace la vida nada fácil a la pequeña. En el colegio le hace falta un recurso, bien un intérprete de signos, bien un comunicador social; pues no puede socializar, expresar sus necesidades o sentimientos. Participar como una más entre sus compañeros.

Ella, la pequeña, hizo que Álvaro y yo nos conociéramos allá por el año 2016. Cómo pasa el tiempo. Parece que fue ayer cuando Ana me llamó; quería que conociese a su primo.

Solo me queda dar, una vez más, las gracias a Álvaro, sus hermanos y su empresa.

La solidaridad es un bien escaso y más en tiempos de pandemia.

Gracias en nombre del Patronato de la Fundación.

Antonio Guerrero. 670 86 36 86