En el Boletín Oficial del Parlamento Andaluz (BOPA) se ha publicado hoy el texto de la Ley de Atención Temprana que se debatirá y votará en el próximo mes de febrero.

Ley, largamente esperada, comenzamos en junio 2015, hace casi ocho años, a hablar con todos los grupos del arco parlamentario sobre la necesidad de que la atención temprana fuese regulada por ley.

En aquel entonces no había nada, ni ley, ni decreto, había algunas instrucciones y un gran abandono de los menores.

Las sesiones de terapia se pagaban a poco más 12 € y para que fuese medio rentable tenías que atender a cinco-seis niñas o niños a la vez. Claro, así no se recuperaban, los ponías a colorear. Porque una sesión grupal con niñas o niños de distintas edades, trastornos, era infructuosa.

Me recibieron todos los grupos parlamentarios, sus portavoces y responsables del área de salud. Nunca me recibió -ni quiso saber nada de mi-, Susana Díaz, presidenta de la Junta de Andalucía. Solo tuve una charla con Francisco Vargas que me dijo que iba a suscribir una PNL, hizo venir a Inmaculada Nieto desde Algeciras y en el último momento se echó para atrás y no firmó.

Por aquella época pensaba -yo y muchas otras personas- que aquella PNL sería la apertura de derechos a nuestros peques, pagar las deudas a los terapeutas (pues la Consejería pagaba por subvención a año vencido) había algunos que cobraban cada 6-8 meses. Una PNL es un documento que se debate, se vota y -sea cual sea el resultado de la votación- se guarda en lo más profundo del cajón de turno y … la vida continúa. Exactamente igual que antes de la PNL.

Luego vinieron los Acuerdos Marco, que era otra forma de contratar con la administración. Ya los pagos se iban normalizando pero la atención temprana seguía siendo caótica. Solo se atendía una especialidad, por ejemplo, psicología, si además necesitaba logopedia, por ejemplo, esa iba a cargo del presupuesto familiar o simplemente no se daba.

De todo esto que estoy contando los CAIT no eran responsables, demasiado hacían con aquellos mimbres. De hecho los tenían cogidos por “salva sea la parte” y si te mueves o sacas los pies del plato. Te quedabas sin subvención. Así es que todos callados, sin unión, cada uno por un lado y las niñas y niños como podían.

¿Las madres y familias? Simplemente: imagínense.

Bueno, pues viendo que la PNL no había tenido los resultados esperados -vamos, que ni caso-, propuse a los grupos redactar una proposición del Ley. Susana Díaz ni su partido quisieron saber de mí, nunca. Pero sí el grupo popular, Ciudadanos, Izquierda Unida y Podemos.

Convocamos a un grupo de 25 personas del mundo de la medicina, pediatría, neurólogos, legisladores,psicólogos logopedas, … y se pusieron a trabajar.

Fueron muchas reuniones con JuanMa Moreno, Lina Garcia, Ana Vanesa Garcia, Beatriz Jurado, Alicia Martinez, Antonio Maillo, Inmaculada Nieto, Esperanza Gómez, Teresa Rodríguez, Juan Marín, Marta Bosquet, Isabel Albás. Todo el arco parlamentario que conformaba la oposición y que sí, unidos, eran mayoría, pues Susana Díaz gobernaba en minoría, Ciudadanos había sido socio de investidura pero no de gobierno.

Se redactó una buena Ley de Atención Temprana, paso los filtros del Consejo Económico y Social y Consejo Consultivo.

Se iba a debatir, votar y aprobar en febrero de 2016. Pues todos los grupos parlamentarios tenían comprometido el SÍ y, por tanto, había mayoría absoluta.

El mismo día del debate, ya sentado en la tribuna de invitados al pleno parlamentario, se acercó a mí Marta Bosquet, parlamentaria de Ciudadanos que había llevado las conversaciones y me dice que quiere hablar conmigo. La acompaño y me dice que ha tenido una conversación “de mujer a mujer” con Susana Díaz y que van a cambiar el sentido del voto y la ley sería rechazada. Juan Marín se había ido en AVE a Madrid, aquel mismo día. ¡¡Vamos, que se quitó de enmedio y dejó el marrón a Marta Bosquet!!

El salón de usos múltiples estaba con muchas familias que habían venido desde distintos puntos de Andalucía para algo que iba a ser histórico.

Se produjo el debate, Esperanza Gómez se rompió en el estrado. Ella era mamá Down y había entrado en política por la Atención Temprana. Muy contundentes Ana Vanesa García, por el grupo popular e Inmaculada Nieto por Izquierda Unida. De la intervención de Marta Bosquet, no voy a perder (a mi edad) un solo segundo.

  • Ni que decir tiene que desde entonces se perdieron las relaciones con Ciudadanos.

Aún recuerdo agachada, en la moqueta del estrado de invitados a plenos a Lina García, portavoz de Salud (hoy Consejera de Salud) hablando conmigo para aceptar o no las condiciones de Ciudadanos a través de Juan Marín de dejar para el siguiente ejercicio las distintas (al menos tres) peticiones de incremento presupuestario para aliviar las larguísimas listas de espera de atención temprana. AUNQUE SABÍAMOS QUE NOS IBAN A DEJAR TIRADOS, SIEMPRE CEDIMOS, PERO JAMÁS HUBO INCREMENTOS PRESUPUESTARIOS.

  • Ni Ciudadanos, ni Juan Marín, ni Marta Bosquet, ni Isabel Albás, ayudaron JAMÁS A LA ATENCIÓN TEMPRANA EN ANDALUCÍA. Nada tenemos que agradecerles, ni al partido ni a las personas.

En la pasada legislatura me reúno con el presidente, JuanMa Moreno, y toma la aprobación de una Ley de Atención Temprana como una apuesta personal y da instrucciones al partido para que se pongan a trabajar. Se trabajó, se redactó una Ley, se sometió a consideración de los agentes sociales, colegios profesionales, familias, Cermi, CAITs, profesionales y un larguísimo etcétera.

Cuando el texto llega al Parlamento es Beatriz Jurado, por el Partido Popular la que lleva la gestión de la misma.

Esta mañana, leo el texto final en el BOPA.

  • Me ha emocionado. Las lágrimas han salido, como salieron a Esperanza Gómez. Aquellas de tristeza, decepción y dolor y las de hoy de alegría.

Han sido casi ocho años trabajando cada día, incluso en vacaciones, por estas niñas, niños y sus familias. Lo que más lamento es que en el camino han sido muchas niñas y niños quiene se han quedado fuera, sin el amparo y protección de esta ley.

No voy a entrar en desgranar la ley, pues la podréis leer. Pero sí voy a decir que es una buena ley.

  • Muy buena Ley de Atención Temprana.

El diálogo ha estado presente en los grupos, se han incorporado unas sesenta enmiendas. Eso da idea del talante de los grupos.

Como dije en mi intervención en el Parlamento, esta Ley debe salir por unanimidad. No hay ninguna razón para estar en el no, ni en la abstención. Todo es y será mejorable, pero esta ley está redactada de manera que resistirá muy bien el paso del tiempo.

  • Esta no es una ley política ni de partido. No es una ley que como la presenta fulanito pues … voto que sí o que no.

No, esta ley coloca a las niñas y niños en el centro, junto a sus familias. Verdadero motor de recuperación. Hace muchísimo hincapié en acercar los recursos a los menores. Incluso prevé ciertos ajustes en los CAIT para que ese acercamiento sea una realidad. Así se dice:

“Se podrán articular mecanismos de flexibilización en los CAIT para que de manera extraordinaria puedan ampliar la atención a menores que estén en listas de espera más de un mes”.

Se reconoce como un derecho subjetivo. Se implican las tres Consejerías, Salud, Igualdad, Educación.

Nadie está libre de que le nazca una hija o un hijo con trastornos, o nieta o nieto. Esta ley viene a regular los derechos de los que ya han nacido, de los que están el vientre de la madre y de los que nacerán hoy, mañana o en un futuro.

Tengo que dar las gracias a todas y cada una de las parlamentarias que se han implicado, discutido, aportado para que la Ley de Atención Temprana sea pionera y pueda ser la base de una Ley Nacional de Atención Temprana.

No me retiro a mis cuarteles de invierno.

Ahora tenemos que poner el objetivo en la segunda infancia y la adolescencia.

Ya que no fue posible la creación de un grupo de trabajo en la pasada legislatura, lo pediré a la SG de Humanización el próximo lunes, que me recibe, y al propio presidente para que impulse la cobertura de esa necesidad y pronto podamos leer, pero referido a segunda infancia y adolescencia, lo que se dice en esta.

“Igualdad de oportunidades. Las personas menores de seis años y sus familias gozarán de idénticas
oportunidades en el acceso, promoción y desarrollo, sean cuales sean sus capacidades, lugar de
residencia, circunstancias familiares, sociales, económicas, religiosas o de cualquier otra índole, sin
que quepa discriminación de ningún tipo, incluyendo la perspectiva de género de manera transversal.”

En cuanto sepa la fecha del pleno lo haré saber, si hay familias que quieran venir a ese día histórico que me lo digan. Pediremos el salón de usos múltiples, si es necesario.

Será un día de regocijo y alegría para todos. Aunque la Atención Temprana siga acabando a los 6 años dará unos derechos a peque y familias que hasta hoy no lo tienen.

Bienvenida esa Ley, es mejor legislar que decretar y gracias a todas personas, instituciones, familias, profesionales, colectivos y representantes del pueblo en el parlamento que la han hecho posible.

Antonio Guerrero.

Plataforma de Atención Temprana y Fundación AK Antonio Guerrero

Aquí está el texto publicado hoy en el BOPA